Con motivo del 30 aniversario de Plebiscito de 1988, el cual marcó un cambio en la Historia de Chile, la Fundación Konrad Adenauer en cooperación con la Fundación Patricio Aylwin y la Pontificia Universidad Católica de Chile, organizaron una serie de seminarios, que invitaron a reflexionar sobre el significado que tiene hoy en día dicho acontecimiento. En el Seminario «La recuperación de la Democracia en Chile y sus enseñanzas para las nuevas generaciones: a 30 años del Plebiscito del 5 de octubre, Testigos de la Historia», Gutenberg Martínez, recordó las condiciones que enfrentaba Chile a nivel social y económico, señaló: “La pobreza llegaba al 45% y se estaban violando sostenidamente los DDHH”, estas circunstancias impulsaron a la población a votar», recordando al fallecido ex-presidente Patricio Aylwin: «En la democracia nunca se puede ser conservador, pues siempre requiere su perfeccionamiento y extensión».
El Triunfo del NO en el Plebiscito. Abre las puertas a la recuperación de la democracia y de las concepciones económico- sociales que tenían muy presentes las realidades de los más vulnerables.Es también el triunfo del rechazo a la fuerza y la violencia. Y del compromiso firme y alternativo de la Paz y de la No violencia.
Hanna Arendt nos dice: “que hay que mirar el pasado con ojos de futuro”.
En tiempos de neo-autoritarismos y de neo-fascismos. De extremismos y de la intolerancia de nuevos fundamentalismos. El plebiscito de 1988 nos sugiere la importancia de las convicciones centrales, aquellas que se deben fortalecer hacia el futuro:
La trilogía más virtuosa: Libertad. Justicia.Solidaridad.El compromiso intransable con los Derechos Humanos en todo tiempo y lugar.
La relación consecuente entre medios y fines. Métodos pacíficos y democráticos, donde la dignidad de las personas sea el centro.
Y concebir que la Democracia requiere de su permanente perfeccionamiento, profundización y extensión.
Sin duda el Plebiscito es un acontecimiento relevante de la Historia patria.
En honor al tiempo, concluyamos destacando cuatro aspectos:
Primero. El triunfo del No representa el éxito de una estrategia democrática, pacífica y de movilización creciente, articulada entre las organizaciones sociales, los partidos políticos y un mundo de ciudadanos libres. Aquí no hay elites iluminadas; siguiendo un slogan de antaño, lo que hubo fue pueblo, liderazgo y organización.
Segundo. Lo que triunfa es una Estrategia, concebida y discutida muy conscientemente. Que recoge opiniones y aportes, que luego adopta decisiones, que es capaz de acordar sumatorias crecientes de fuerzas políticas, sociales y de la ciudadanía. Y que cumple con una condición de la política seria y responsable, esta es la de orientar y conducir un proceso.
Tercero. Es una estrategia, que recoge las experiencias de las distintas manifestaciones contrarias a la Dictadura, y que busca una recuperación en paz y sin violencia de la Democracia en Chile.
Cuarto. Es una estrategia sustentada en la revalorización de la democracia y los derechos humanos. Que por ende no teme el dialogo y que promueve las convergencias y los acuerdos que hacen grande a los países.
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