Las noticias sobre Venezuela son mortales. Al atentado permanente a la libertad y a la democracia, se sumó el desabastecimiento alimentario, con las imágenes de niños que hacen evidente la desnutrición y ahora se agrega la falta de medicamentos que atenta contra la vida y la salud de los ciudadanos. Violación sostenida y denunciada por todos los organismos internacionales de los Derechos Humanos, políticos, económicos y sociales.
Uno de los países más ricos de América Latina, destruido a galope tendido por la retro-excavadora venezolana, denominada el socialismo del siglo XXI. Un país que destacó por su solidaridad con Chile, en los tiempos de la dictadura, recibiendo solidariamente a miles de compatriotas solidariamente. Un país y un pueblo que desafían diariamente la conciencia de los demócratas.
Chile, encabezado por nuestro ministro de Relaciones Exteriores ha actuado en conformidad a los tratados internacionales suscritos por nuestro país, que le otorgan a los Derechos Humanos (DD.HH.) y a la democracia, un valor universal en todo tiempo y lugar, superando la añeja política de no intromisión siempre alegada por las dictaduras, sea ayer la de Pinochet u hoy la de Maduro.
Esta conducta de nuestro gobierno y el canciller, ha generado la respuesta inusitada de diversos personeros del Partido Comunista, que junto a parte del Frente Amplio, pretende lo indefendible, intentando descalificar a don Heraldo Muñoz, haciendo gala de epítetos gastados y usados por los defensores de las diversas dictaduras.
Es imposible mantenerse impávido antes estas conductas y practicar una política, en que todo esto no importa y no limita el comportamiento político democrático en Chile.
Por eso, a fines del mes pasado 151 dirigentes presentamos un voto político en la Junta Nacional del PDC en que se propuso descartar la continuidad de la Nueva Mayoría y su ampliación al Frente Amplio, “tanto por ser una experiencia que termina con el actual gobierno, como porque ésta demostró que los acuerdos, en que conviven diferencias en conceptos básicos y en la estrategia central no tienen buenos resultados”. Así se propuso que la línea al futuro, debía ser la de buscar acuerdos políticos preferentes con sectores de pensamiento socialista democrático, “social demócrata, social liberal e independientes comprometidos con los DD.HH., la democracia y el crecimiento con equidad.”
Lamentablemente esta propuesta fue rechazada con los efectos políticos consiguientes.
Hoy, debemos respaldar al canciller Muñoz, denunciar el comportamiento contrario a la vigencia de los DD.HH. del PC y de quienes por acción u omisión respaldan la dictadura venezolana.
Esto debe estar presente en la política presente y futura en Chile. Y constituye una verdadera interpelación para quienes hemos defendido siempre la democracia y los DD.HH.
La Tercera. Opinión Voces. 21 FEB 2018.